AH Trancoso – AH Linhares da Beira

Lugares de paso: Miguel Choco, Venda do Cepo, Aldeia Nova, Muxagata, Vila Soeiro do Chão, Mesquitela, Carrapichana

Esta etapa sale de Trancoso por el lado sur, entra en un camino de tierra y desciende hacia Miguel Choco. Aquí, poco después de pasar por Venda do Cepo, llega al arroyo de Muxagata. Desciende por el estrecho valle del arroyo y acompaña el curso de agua. Antes de llegar a Aldeia Nova, la modalidad pedestre del gran recorrido GR22 cruza el río hacia la otra orilla y ahora sigue el camino de tierra para más adelante atravesar de nuevo el río. De aquí continúa hacia el sur, acompañando el arroyo con el mismo nombre hasta su desembocadura, en el río Mondego. En este río es necesario atravesar un embalse (cruce condicionado en períodos de inundación, ver alternativa). Abandonando el valle, cruza de inmediato la carretera EN16 y llega a Vila Soeiro do Chão. Utilizando principalmente caminos de tierra, pasa por Mesquitela y Carrapichana. En este último pueblo cruza la carretera EN17 y continúa hacia el sur, subiendo gradualmente hasta llegar a Figueiró da Serra, donde desciende al arroyo de Linhares y converge con el pequeño recorrido PR4, ascendiendo por la calzada romana hasta la Aldea Histórica de Linhares da Beira.

Flora y fauna

_TRANCOSO_ Las mesetas del entorno de Trancoso se caracterizan por estar rodeadas de elevaciones que unas veces son formaciones rocosas, otras están cubiertas de pinos, donde podemos encontrar una de las formaciones agrícolas más peculiares de esta región: los campos rodeados de setos arbóreos, en este caso, esencialmente formados por roble melojo. El valle de Muxagata se cultiva en toda su extensión y está flanqueado por alisos. Desde los pinos y retamas que dominan el paisaje se oyen sonidos de especies como la corneja negra (Corvus corone corone) y el pito real (Picus viridis). A lo largo de los caminos y pantanos encontramos setos vivos en forma de espino albar (Crataegus monogyna) o incluso torvisco (Daphne gnidium). Cerca del arroyo podemos ver especies como el pardillo común (Linaria cannabina), el jilguero (Carduelis carduelis), la tarabilla, la tórtola, el mirlo común (Turdus merula), entre otros. Por otro lado, en lo alto del valle, al acercamos a entornos serranos podemos encontrar las especies ratonero común o el alcaudón real (Lanius excubitor). _MUXAGATA_ El arroyo de Muxagata quizás es el elemento natural más cercano y obvio. Desembocando en el río Mondego a unos tres kilómetros más hacia el sur, se ha aprovechado el poder de sus aguas para alimentar a los molinos. En las aguas del arroyo se alimentan el gran cormorán (Phalacrocorax carbo) y el martín pescador (Alcedo athis). En la galería ripícola de alisos y sauces (Salix sp.) se abrigan el ruiseñor bastardo (Cettia cetti) y el rabilargo (Cyanopica cooki). El buitrón (Cisticola juncidis) vuela repetidamente sobre la pradera, emitiendo sus llamamientos característicos. Cerca de los límites de las viviendas predominan los olivares tradicionales y en la ladera hay restos de pinares. El pastoreo y los incendios forestales han transformado estas laderas y cimas en un entorno rocoso dominado por grandes afloramientos de granito, algunos de los cuales forman pequeños acantilados. _LINHARES DA BEIRA_ En la meseta serrana que domina esta Aldea Histórica, encontramos algunos de los campos agrícolas más antiguos de Serra da Estrela. Desde aquí ya vemos Mondeguinho y encontramos algunos bosques altos de caducifolias que nos acompañan a lo largo de toda la ladera de Linhares. A partir de los 1300 metros de altitud, y ya sin especies arbóreas, la cubierta vegetal está dominada por el brezo y la sabina que encontramos en los senderos de Malhão y Santinha. Cerca del valle de Rossim se puede observar la rara cigüeña negra. En el lado norte de la sierra, el río Mondego muestra una densa galería ribereña donde predomina el aliso, con la presencia de sauce (Salix sp.) y fresnos. En este lugar donde cruzamos el río, podemos observar especies como el chochín común (Troglodytes troglodytes), el petirrojo (Erithacus rubecula), el herrerillo común (Parus caeruleus), la lavandera blanca común y el ruiseñor bastardo, entre otras.